Con la suba de tres puntos más en los derechos de exportación y considerando que ya se comercializaron 15 millones de toneladas de soja de la actual campaña, el Gobierno tendrá una recaudación extra de US$354 millones. De esos recursos, unos US$186 millones irán para la compensación a los productores de soja y otros US$167 millones para una rebaja de retenciones a las economías regionales y otros granos.

Para el trigo y el maíz, las retenciones quedan en el 12%, pero habrá reducciones para los productos procesados, como la harina.

En la reducción de derechos de exportación a economías regionales, arvejas, porotos, garbanzos, lentejas tendrán bajas de 9 a 5% en las retenciones. El maní pasará de 12 a 7%.

La harina de trigo, en tanto, verá reducida la tasa de 9 a 7%. En girasol la retención se disminuirá de 12 a 7% (en girasol confitero y aceite de girasol se pasa de 12 a 5%). Por el lado del maíz pisingallo, que se usa para pochoclo, del 9% ahora pagará 5%. En arroz paddy, la tasa que estaba en 12% ahora se retrotraerá a 6%. El arroz pulido cambia de 9 a 5%.

No habrá cambios para la carne vacuna, que continuará con una alícuota del 9%. En tanto, hay una reducción del 9 al 5% en carne ovina y de 9 a 5% para carne porcina. La leche sigue sin cambios, con un 5%.

Durante más de dos horas y media de encuentro con la Mesa de Enlace, Basterra estuvo acompañado por la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca. También por el presidente del Banco Nación, Eduardo Hecker, con quien se abrió una vía para negociar posibles créditos.

“No es una exacción del Estado, estamos redistribuyendo”, señaló Basterra tras el encuentro con la Mesa de Enlace.“A tres de cuatro productores (las retenciones en soja) les van a quedar en 30% o por debajo”, agregó el funcionario. “No recaudamos para el fisco pero compensamos a 3 de cada 4 productores hasta 1000 toneladas”, agregó. Según el Gobierno, el 33% será para uno de cada cuatro productores.

En rigor, se prometió la implementación de una compensación de hasta 1000 toneladas que alcanzará a 42.000 productores, medida que ayer por la mañana anticipó la nacion en su edición digital. Esos productores representan el 74% de los agricultores que hacen el 23% de la producción de soja. En tanto, quedan afuera de ese beneficio 14.884 productores que representan el 77% de la producción del cultivo.

Según el Gobierno, por efecto de la compensación, los productores de hasta 100 toneladas de soja quedarán con una retención equivalente efectiva del 21%; los de entre 100 y 200 toneladas, un 24%, de 201 a 300 toneladas un 27%; de 301 a 400 toneladas una retención del 28%; de 401 a 500 toneladas un 29% y de 501 a 1000 toneladas un 30% de retenciones. A los productores se les tomará como base la cosecha del año pasado.

Tras el encuentro, en la Mesa de Enlace reconocieron que no lograron revertir la suba de los tres puntos, y los dirigentes quedaron en analizar lo presentado por el Gobierno.

“Vamos a hablar con las bases, si no lo aceptan vamos a seguir para adelante”, indicó Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), respecto de una eventual medida de fuerza. “La respuesta de hoy no llega a cubrir lo que queremos; necesitamos la eliminación (de los 3 puntos)”, agregó.

Chemes le reconoció, no obstante, al Gobierno que “está tratando de mostrar voluntad de diálogo, de no confrontar”. Ante una consulta respecto de las protestas de los productores con asambleas y tractorazos, Basterra dijo que “la decisión que tomen (los dirigentes) la van a tomar con información”. Esto lo dijo por el paquete presentado. CRA ayer ya hizo una reunión con referentes de confederaciones de la entidad para analizar la situación.

Aunque no hubo una definición, los ruralistas comenzaron a abordar con el funcionario nacional la posibilidad de que las retenciones puedan usarse para una especie de reembolso vía el impuesto a las ganancias.

Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), dijo que el sector se fue del encuentro con un “sabor amargo” por la confirmación de la suba de las retenciones a la soja.

“En la reunión, ratificamos nuestra convicción de que los derechos de exportación no son el camino. Se abrió una instancia para analizar mecanismos por vía del impuesto a las ganancias para compensar el efecto fiscal de los derechos de exportación. A Basterra le reclamábamos, además de los derechos de exportación, analizar otras de las propuestas contenidas en el documento que elaboramos con la Comisión de Enlace, cosa que pudimos hacer en esta oportunidad con la participación de la vicejefa de gabinete y del presidente del Banco Nación”, indicó.

Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, señaló que cada entidad de la Mesa de Enlace va a consultar internamente para “explicar la decisión que ha tomado el Gobierno”.

“Veremos en detalle cuando salga el decreto. La Mesa de Enlace va a reunirse y veremos en cuestión de ello qué medidas se van a tomar”, señaló el presidente de Coninagro. Iannizzotto destacó que haya diálogo y que se incorporaran al encuentro Todesca y Hecker.

Carlos Achetoni, presidente de Federación Agraria Argentina (FAA), señaló que su entidad también hará consultas con sus bases. “Tenemos que consultarlo, no nos vamos conformes”, expresó.

La Nación – Fernando Bertello